¿A quien no le apetece un buen café a media mañana?
Muchas empresas contratan máquinas de dispensación automática, donde se sirven bebidas calientes como café, cortado, chocolate, etc., para que sus trabajadores puedan disfrutar de unos pequeños momentos de relax durante su jornada laboral.
Existen dos tipos de suministro de agua a las máquinas dispensadoras: las autoalimentadas, que llevan incorporado un depósito de agua mineral, y las máquinas que no son autoalimentadas y deben conectarse a la red de agua de la empresa que contrata la máquina de vending.
Cuando este último tipo de máquinas se instalan en empresas de ámbito alimentario, como pueden ser hospitales, centros geriátricos, o industrias alimentarias, tenemos asegurado que el agua con la que se elaborará el café o el cortado en la máquina dispensadora será agua potable, ya que en este tipo de empresas están obligados por la normativa sanitaria a realizar análisis de la potabilidad del agua de forma diaria o como mínimo semanal.
Cuando estas máquinas dispensadoras se instalan en empresas fuera del ámbito alimentario no tenemos asegurado que el agua para su elaboración sea potable, ya que nadie acostumbra a realizar un análisis previo de potabilidad del agua antes de su instalación, ni se comprueba en la mayoría de los casos ni durante el funcionamiento de la misma que el agua sea potable.
Y uno se puede preguntar: ¿Puede existir todavía y en nuestra época agua no potable?
El agua puede ser no potable por muchos motivos, por ejemplo, exceso de conductividad, aumento de algunas substancias químicas, como son el cobre, nitratos, nitritos, calcio, magnesio, níquel hierro, plomo, etc., o presencia de ciertos microorganismos.
Esto puede suceder en función del material de construcción de las cañerías que constituyen la red de agua potable (cobre, plomo), del material de construcción de grifos o incluso de la fuente de suministro del agua (pozo, mina, cisterna, etc.).
El R.D. 140/2003, de 7 de Febrero, por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua para consumo humano es el que regula, de forma normativa, la calidad del agua potable y los tipos de análisis a realizar para garantizar la aptitud de la misma.
Realizando un pequeño análisis laboratorial del agua en el punto de salida previo a la instalación de la máquina dispensadora de vending que va a realizar la elaboración de las bebidas calientes, controlaremos la calidad sanitaria del agua de elaboración de café, leche, cortado, chocolate, etc., y podremos asegurar entonces un suministro seguro de las bebidas calientes al consumidor.
